Este incremento ha otorgado a Vodafone una mayor eficiencia y agilidad en la gestión de incidencias. Alrededor del 97% de los usuarios que utilizan la aplicación logran resolver sus problemas sin necesidad de recurrir a una llamada telefónica, lo que no solo beneficia a los clientes sino que también optimiza los tiempos de resolución.
La apuesta de Vodafone por las herramientas de autogestión se traduce en que más de 40.000 usuarios al mes logran solventar sus problemas sin la intervención de un técnico. Además, la App Mi Vodafone proporciona la posibilidad de rastrear el estado de la avería, manteniendo a los usuarios informados en tiempo real sobre el proceso de solución.
Vodafone se alía con Aventus para impulsar la economía de las cosas basada en blockchain
Leer más
Entre las innovaciones más recientes, destaca la guía de diagnóstico e instalación con tecnologías de Realidad Aumentada que cuenta con un proceso simple y amigable: si algún dispositivo presenta fallos, la compañía envía uno nuevo directamente al domicilio del cliente. A partir de ahí, el usuario accede a la App Mi Vodafone y sigue una sencilla guía que, aprovechando la cámara del smartphone y la realidad aumentada, lo asiste en la conexión de cables del nuevo dispositivo y verifica la instalación.
En caso de que persista la dificultad, Vodafone ha previsto soluciones adicionales. Los clientes pueden notificar el problema a través de la aplicación para que técnicos especializados realicen pruebas remotas y resuelvan el conflicto. En todo momento, el usuario se mantendrá informado sobre el estado de su avería, ya sea a través de la aplicación, mediante chat o mediante una llamada personalizada.