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La Fundación España Salud y Huawei han desarrollado el proyecto ‘taxi cardioprotegido’, que se ha presentado en Barcelona. Por el momento, la prueba piloto ha revelado cómo 50 vehículos recibirán desfibriladores de última generación. El objetivo de esto es intentar “salvar vidas”. Además, se pondrá en marcha en Madrid próximamente, con la misma dotación de medio centenar de taxis participantes.

Stellantis y Qualcomm Technologies han realizado un acuerdo para trabajar en conjunto para aplicar los últimos avances de Snapdragon Digital Chassis con el objetivo de ofrecer experiencias inteligentes, personalizables e inmersivas a millones de vehículos de 14 marcas de Stellantis a partir de 2024. Además, aprovechando las plataformas Snapdragon Cockpit y la capacidad 5G en los sistemas telemáticos, Stellantis podrá satisfacer las nuevas expectativas de los clientes de experiencias personalizadas que sean continuamente actualizables.

La empresa de automóviles prueba la introducción de sonidos específicos como timbres de bicicletas o pasos para permitir a los conductores distinguir los peligros y poder comprobar por dónde se acercan a su vehículo.

El grupo de automóviles Jaguar Land Rover está utilizando la tecnología blockchain con el objetivo de incrementar la sostenibilidad de sus materiales. Jaguar se ha marcado como objetivo que en 2039 toda su cadena de suministros, productos y operaciones sea neutra en emisiones.

La compañía surcoreana de tecnología, Samsung, ha presentado hoy el que se ha convertido en su primer sensor de imagen ISOCELL que proporciona la posibilidad de operar en aplicaciones para vehículos. Este nuevo sensor, conocido cómo ISOCELL Auto 4AC, se trata de un sensor de cámara de visualización especialmente diseñado para monitores de vista envolvente o cámaras retrovisoras que dispongan de una resolución HD. Dispone de una solución especial, Corner Pixel, con la que el propio sensor logra mejorar el campo de visión del que dispone por lo que la conducción se vuelve más segura en todos los sentidos.

El valor de los pagos a bordo de los vehículos, en los que el pago se realiza a través de sistemas integrados en los vehículos, alcanzará los 86.000 millones de dólares en 2025, frente a los 543 millones de dólares en 2020, según un reciente estudio de Juniper Research.