pagos instantáneos

Es quizás una premisa un poco impopular pero necesaria: el concepto de esperar parece haberse convertido en un inconveniente desfasado. La era de la inmediatez ha inaugurado un nuevo modelo donde la gratificación instantánea es, más que deseada, exigida. Este cambio en las expectativas de los consumidores tiene implicaciones profundas en diversos sectores, desde las finanzas hasta la moda, transformando la manera en que interactuamos con el mundo que nos rodea.

La Unión Europea ha dado un paso decisivo hacia la modernización de sus servicios financieros al obligar a todos los bancos comunitarios a ofrecer a sus clientes pagos instantáneos, al estilo de Bizum. Estas transferencias ultrarrápidas, completadas en apenas 10 segundos, estarán disponibles las 24 horas del día, los 365 días del año.

El valor de los pagos instantáneos, en los que las transacciones se completan en diez segundos, alcanzará los 18 billones de dólares en 2025, frente a los 3 billones de dólares en 2020; lo que supone un crecimiento de más del 500%, según un estudio de Juniper Research.