Los consumidores perderán a nivel global 40.000 millones de dólares en 2022 a causa de las llamadas automáticas fraudulentas, lo que supone una importante subida respecto a la previsión de 31.000 millones de este 2021.
La GSMA amplía su cartera de servicios de prevención del fraude para mejorar la capacidad de la industria de combatir las llamadas automáticas y otras no deseadas o fraudulentas.