China ha tomado una drástica decisión para fomentar el uso del producto tecnológico nacional. Y es que el gigante asiático ha ordenado al Gobierno del país y a las empresas dependientes del Estado a que sustituyan en un plazo de dos años sus ordenadores de marcas extranjeras por otros elaborados por empresas nacionales.
El plan, que pretende fomentar el uso de productos locales con softwares desarrollados en el país, ha sido motivado por el plan de separar a China de la posible dependencia de la tecnología norteamericana. Además, podría hacer que se reemplacen cerca de 50 millones de PCs en el plazo marcado por las autoridades chinas para llevarlo a cabo.
Efecto directo en el mercado de dispositivos
No se han hecho esperar los cambios de tendencia en el mercado a raíz de esta decisión. “Lenovo podría aumentar drásticamente sus ventas gracias a la orden de Pekín de que los organismos del gobierno central y las empresas respaldadas por el Estado sustituyan los ordenadores de marca extranjera”, afirma Nathan Naidu, analista de Bloomberg Intelligence.
Y es que, ante esta decisión, marcas de fabricantes como Lenovo, Huawei, Honor e Inspur pueden dar un importante salto en las ventas nacionales y aumentar sus tasas de mercado internacionales. Por otra parte, también los desarrolladores locales como Kingsoft y Standard Software han adelantado a otras importantes compañías extranjeras como Microsoft y Adobe.
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La campaña no se quedará aquí y se espera que más adelante las autoridades chinas extiendan esta decisión a los gobiernos provinciales para culminar el cambio, ajustando para estos casos el plazo de dos años.
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