Se trata de un teléfono móvil de alta calidad y duradero, recargable mediante tarjeta prepago, que permite elegir entre todas las tarifas y opciones de ahorro de Orange que mejor se adapten al cliente.
El objetivo de ambas empresas es acercar la telefonía móvil a todos, con un teléfono sencillo y accesible que se venderá con la batería cargada (cuando se acabe se puede enchufar de nuevo a la corriente), número de teléfono, y una tarjeta SIM recargable Orange insertada con saldo inicial de 12 euros, listo para hacer llamadas desde el primer momento. Además de llevar la firma de Orange, el diseño recordará el universo colorista de BIC; ya que es "desenfadado, moderno y divertido", según uno de sus creadores. Su envase innovador permitirá una venta directa al cliente.
El móvil se puede adquirir en puntos de venta accesibles tales como estancos, papelerías, gasolineras y grandes superficies comerciales desde la primera semana de julio.
La fabricación del BIC Phone se ha subcontratado a TCL (Alcatel móviles)