La división de sensores sigue siendo un éxito para Sony, aunque la de teléfonos móviles acumula pérdidas.
Sony ha decidido separar su negocio de consolas del resto de la compañía. PlayStation, el que muchos consideran la mina de oro de la empresa japonesa que mantendría en pie a muchas otras divisiones, ya no formará parte de la casa matriz.
De ahora en adelante Sony Interactive Entertainment será el nombre de la compañía que aglutinará a dos antiguas divisiones: Sony Computer Entertainment, dedicada hasta ahora al software y hardware de PlayStation y Sony Network Entertainment, que se encargaba de los servicios PlayStation Vue y PlayStation Store.
La nueva empresa tendrá como presidente ejecutivo a Andrew House y sus oficinas centrales estarán en San Mateo, California, con otros dos emplazamientos: Londres y Tokyo. Toda la operación comenzará a ejecutarse desde el 1 de abril.
Desde luego esta unión tiene un único objetivo: que la empresa proporcione una experiencia más integral a los jugadores y que se mejore la monetización y los ingresos, con un aumento de los mismos de más del 5% para 2018.
Para los usuarios finales probablemente este cambio será transparente y apenas lo notarán. También se pudo conocer que la división de sensores de imagen sigue con gran éxito mientras que las de televisores y smartphones son las que mayores pérdidas estarían generando.