El hecho es que cuando ponemos la URL de Telegram, el Whatsapp no nos anuncia nada. Esto pasa en la actualización de la app de mensajería para Android. Así, la app propiedad de Facebook deja un halo de censura, y eso que Telegram se usa menos que Whatsapp ( 2 de cada diez por 8 de cada diez).
Con esta práctica Whatsapp no permite a los usuarios ni acceder directamente a la URL, ni ver que aspecto tiene la página de destino. Parece que prefieren no concederle este honor a Telegram, aunque vaya en detrimento de la experiencia de usuario de sus seguidores.