En un mercado saturado de opciones, Surfshark VPN ha emergido como uno de los servicios más destacados gracias a su enfoque equilibrado entre rendimiento, seguridad, usabilidad y precio.
Aunque se trata de un proveedor relativamente joven, Surfshark ha logrado consolidarse como una alternativa competitiva frente a nombres establecidos en el sector de las redes privadas virtuales.
Surfshark se posiciona actualmente como uno de los servicios más rápidos del mercado
Uno de los factores más relevantes para evaluar una VPN es su velocidad. Surfshark se posiciona actualmente como uno de los servicios más rápidos del mercado, especialmente al utilizar el protocolo WireGuard.
Las pruebas que hemos podido realizar muestran velocidades superiores a los 950 Mbps al conectarse a servidores cercanos, con resultados consistentes tanto de día como de noche. Esto lo convierte en una opción óptima para usuarios que requieren alto rendimiento, ya sea para streaming en 4K, descargas pesadas o videollamadas de alta calidad. Si nos conectamos con el protocolo OpenVPN, aunque más robusto, logramos velocidades algomás limitadas (por encima de los 455 Mbps), lo cual es esperable por su mayor carga computacional.
Cómo configurar e instalar Surfshark
Uno de los aspectos mejor logrados de Surfshark es su facilidad de instalación y configuración inicial. Ya sea en ordenadores de escritorio, dispositivos móviles o incluso televisores inteligentes, el proceso está diseñado para ser accesible tanto para usuarios principiantes como para perfiles más técnicos.
La instalación comienza descargando la aplicación correspondiente desde la web oficial o desde las tiendas de apps. En sistemas como Windows o macOS, el instalador es ligero y no requiere configuraciones previas complejas. En menos de cinco minutos, el software queda operativo. En dispositivos móviles, bastan un par de toques para tener la VPN lista, con soporte inmediato para autenticación biométrica y widgets en pantalla.

Una vez instalada, la configuración inicial se puede completar en menos de un minuto. El usuario inicia sesión con sus credenciales, elige si desea activar la conexión automática en redes públicas, y puede seleccionar el protocolo de su preferencia —WireGuard, OpenVPN (TCP/UDP) o IKEv2— desde un menú desplegable en la pestaña de configuración
Surfshark también permite gestionar la lista de redes Wi-Fi de confianza, configurar el interruptor de corte (kill switch), elegir servidores favoritos o aplicar funciones avanzadas como el modo No Borders o Multihop. Además, integra opciones para habilitar CleanWeb y ajustar los parámetros del túnel dividido (split tunneling), lo que da mayor control sobre qué aplicaciones usan o no la VPN.
En plataformas más técnicas como Linux, la instalación se puede hacer mediante paquetes .deb o .rpm, y a diferencia de otras VPN, Surfshark ofrece una interfaz gráfica completa, lo que elimina la necesidad de trabajar con comandos en terminal.
Seguridad y privacidad
Surfshark ofrece un conjunto robusto de medidas de seguridad. El cifrado AES-256, junto con los protocolos OpenVPN y WireGuard, garantiza una protección de nivel industrial en la transmisión de datos. A esto se suma un interruptor de corte (kill switch), configurable según el nivel de rigurosidad deseado, que previene filtraciones de IP en caso de desconexión.
Cabe destacar también la incorporación de la protección contra fugas DNS, el modo No Borders y la funcionalidad Multihop
Cabe destacar también la incorporación de la protección contra fugas DNS, el modo No Borders —que facilita el acceso a contenidos en regiones con censura como pueda ser China— y la funcionalidad Multihop, que permite enrutar el tráfico a través de múltiples servidores para añadir una capa extra de anonimato.
En cuanto a privacidad, Surfshark ha demostrado transparencia operativa mediante auditorías independientes realizadas por Deloitte y Cure53. Su política de no registro ha sido verificada, y la infraestructura de servidores es 100% basada en RAM, lo que elimina el almacenamiento persistente de datos tras cada reinicio. Aunque su sede está en Países Bajos, la empresa comparte informes de transparencia trimestrales en los que afirma no haber cedido información de usuarios a autoridades.
Funcionalidades avanzadas
Surfshark no se limita a ser una VPN básica. Su arsenal de herramientas se amplía con funcionalidades pensadas para el contexto digital actual. CleanWeb, por ejemplo, bloquea anuncios y malware a nivel DNS, con una tasa de bloqueo del 84% según pruebas recientes. También está disponible CleanWeb 2.0 como extensión de navegador, mejorando la protección en sesiones de navegación.
Una función innovadora es Alternative ID, que permite generar una identidad digital completa (correo electrónico incluido) para registrarse en servicios sin revelar información real. Junto a esta, Alternative Number ofrece un número telefónico alternativo desde la app para registros online, aunque esta opción requiere una suscripción adicional.

Además, los planes One y One+ añaden servicios como antivirus integrado, motor de búsqueda libre de rastreadores (Surfshark Search), alertas ante filtraciones de datos (Surfshark Alert) y hasta un servicio automatizado de eliminación de datos personales de bases de datos públicas (Incogni).
Amplia cobertura geográfica y compatibilidad multiplataforma
Surfshark cuenta con una red de servidores en 100 países y 140 ubicaciones, una cobertura destacada que se sigue expandiendo mes a mes, aunque algo por debajo de ExpressVPN (105 países) y NordVPN (118). Lo importante es que mantiene una distribución equilibrada, con fuerte presencia en Europa, América, Asia y regiones como Oriente Medio y África. Cabe destacar también que el servicio indica claramente entre servidores físicos y virtuales, y la ausencia de servidores en Rusia por motivos de seguridad.
En cuanto a compatibilidad, la VPN está disponible en todas las plataformas principales (Windows, macOS, Android, iOS, Linux) y también para Fire Stick, Apple TV y routers.
El diseño de la aplicación es sencillo y funcional. Permite una navegación intuitiva entre pestañas, con opciones visibles para gestionar conexiones, protocolos y servidores. Las versiones móviles están igualmente bien diseñadas, con detalles útiles como widgets y login mediante escaneo de código QR.

Streaming, torrents y uso cotidiano
Uno de los grandes atractivos de Surfshark es su rendimiento frente a servicios de streaming. Durante las pruebas, hemos podido acceder sin problemas a plataformas como Netflix (en varias regiones), Prime Video y Disney+, así como servicios regionales como RTVE, BBC iPlayer o 10 Play. La ausencia de servidores especializados no parece afectar su capacidad para evitar bloqueos geográficos, lo cual simplifica la experiencia del usuario.
En el ámbito del peer-to-peer, permite uso de torrents en todos sus servidores, aunque no incluye funciones como reenvío de puertos.
Relación calidad-precio y oferta especial de cumpleaños
Uno de los principales argumentos a favor de Surfshark es su precio. Ofrece conexiones simultáneas ilimitadas, lo que lo convierte en una opción muy rentable para familias o usuarios con múltiples dispositivos. Además, a diferencia de otras VPN, muchas de sus funciones avanzadas están incluidas en los planes básicos.
Actualmente, con motivo de su aniversario, Surfshark mantiene una oferta especial que reduce el precio del plan de dos años a solo 1,99 euros al mes (frente a los 4,38€ anteriores), incluyendo tres meses adicionales gratuitos que se puede adquirir a través de su página web.