Intel continúa con su proceso de reestructuración corporativa en un intento por recuperar su posición de liderazgo en la industria de los semiconductores.
La compañía ha comunicado que tres miembros de su junta directiva no se postularán para la reelección en la reunión anual de 2025, reduciendo el número total de consejeros a once. Esta decisión se enmarca en la estrategia de la empresa de enfocarse más en la industria de los chips bajo la nueva dirección de su recién nombrado CEO, Lip-Bu Tan.
Los miembros que dejarán la junta incluyen a Omar Ishrak, exdirector ejecutivo de Medtronic, quien había renunciado a su cargo como presidente de Intel en enero de 2023 pero continuaba como director. También se retirarán Tsu-Jae King Liu, decana de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de California en Berkeley, y Risa Lavizzo-Mourey, exprofesora de salud poblacional y equidad en salud en la Universidad de Pensilvania.
En este contexto, Intel refuerza también su con la incorporación de Eric Meurice, exdirector ejecutivo de ASML, proveedor clave de equipos para la fabricación de semiconductores, y Steve Sanghi, CEO interino de Microchip Technology. Estos nombramientos reflejan un cambio en la composición de la junta, alejándose de perfiles provenientes de sectores como la academia, las finanzas y la industria médica, para centrarse en líderes con experiencia específica en la industria de los semiconductores.
"Estamos comprometidos a contar con la combinación adecuada de habilidades, calificaciones y experiencia técnica en la junta", señala Frank Yeary, presidente de Intel.
La visión de Lip-Bu Tan y el futuro de Intel
Desde su llegada, Lip-Bu Tan ha enfatizado la importancia de equilibrar el negocio de productos de Intel con su creciente división de fabricación de chips por contrato, conocida como Intel Foundry Services. En una carta a los accionistas, Tan ha asegurado que su enfoque estará en garantizar la competitividad de la empresa en ambos frentes.
"Para permitir el desarrollo de productos innovadores, es fundamental mantener un enfoque equitativo tanto en el negocio de productos como en la manufactura de semiconductores", afirmó el CEO.
Estos cambios forman parte del plan de reestructuración introducido por el anterior CEO, Pat Gelsinger, que incluía la reducción del 15% de la plantilla y una serie de medidas para optimizar costes y simplificar la organización. Gelsinger, quien dejó su puesto recientemente y ha fichado por una startup de IA cristiana, recibirá una indemnización de 7,9 millones de dólares, aunque perderá todas sus acciones no adquiridas.