El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha decidido no reactivar una demanda por 1.600 millones de dólares contra IBM, presentada por BMC Software, una empresa de software propiedad de KKR.
La disputa surgió a raíz de una supuesta violación de un acuerdo de licencia en el marco de la prestación de servicios tecnológicos a AT&T. BMC acusó a IBM de incumplir un acuerdo contractual al reemplazar su software con una solución propia mientras prestaba servicios de tecnología de la información (TI) a AT&T.
Según la empresa demandante, esta acción constituía un incumplimiento del contrato de licencia, lo que llevó a un tribunal a otorgarle inicialmente una compensación de 1.600 millones de dólares, una de las mayores indemnizaciones en un caso comercial.
Sin embargo, la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito anuló este fallo, argumentando que el acuerdo permitía a IBM sustituir el software de BMC si AT&T solicitaba el cambio de manera independiente. La clave del contrato radicaba en una cláusula que establecía que IBM no podía "desplazar" los productos de BMC con sus propias soluciones, salvo que existieran "razones comerciales válidas" para descontinuar el uso de las licencias de BMC.
El máximo tribunal estadounidense ha rechazado ahora sin comentarios la apelación de BMC para restablecer la indemnización, dejando en firme la decisión de la corte inferior. BMC argumentó ante el Supremo que la interpretación del Quinto Circuito otorgaba a IBM derechos casi ilimitados sobre el uso de su software, afectando la seguridad de los acuerdos contractuales en la industria tecnológica.
Por su parte, IBM ha defendido la decisión del tribunal de apelaciones, asegurando que el caso involucraba una disputa basada en la legislación del estado de Nueva York, sin plantear cuestiones federales que justificaran la intervención del Tribunal Supremo.
De este modo, se cierra un litigio de alto nivel y libera a IBM de la obligación de pagar la multimillonaria compensación que en su momento fue aprobada por un tribunal inferior.