El operador saudí STC ha hecho oficial la adquisición del 5% de acciones restantes de Telefónica que tenía mediante derivados financieros en poder de Morgan Stanley, ampliando hasta el 9,97% su participación
La operación, que comenzó en septiembre de 2023, se materializó con una inversión valorada en 2.100 millones de euros. Sin embargo, para poder consolidar esta participación, STC necesitaba el visto bueno del Gobierno español, dado que Telefónica está considerada una empresa estratégica debido a su relevancia en el sector de las telecomunicaciones y sus vínculos con la defensa nacional. Esto obligaba a que la operación estuviera sometida al 'escudo antiopas', un mecanismo de control para proteger activos clave del país.
La autorización del Gobierno llegó el pasado 28 de noviembre, lo que activó un plazo de seis meses para que STC pudiera convertir su participación indirecta en acciones directas. Este proceso ha culminado ahora, justo una semana después de que Marc Murtra, presidente de Telefónica, viajara a Riad para reunirse con los directivos de STC, cuya mayoría accionarial (62%) está controlada por el fondo soberano de Arabia Saudí, el Public Investment Fund (PIF).
Con esta posición se abre otro debate relevante en el seno de la teleco español y es que con esta participación, el gigante saudí tiene capacidad para reclamar un asiento en el Consejo de Administración de la compañía, lo que situaría a un país extranjero en el consejo de una de las empresas más estratégicas de España.
IC-A advierte sobre el control
Además, el anuncio de la conversión de la participación se produce en un momento clave, cuando el Instituto de Consejeros Administradores (IC-A) ha solicitado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que investigue si STC, CriteriaCaixa y la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) están obligados a lanzar una oferta pública de adquisición (opa) sobre el 100% de Telefónica. Esta petición está relacionada con los recientes cambios en la presidencia del operador español, con la salida de José María Álvarez-Pallete y la llegada de Marc Murtra a la cabeza de la compañía.
En el panorama accionarial de Telefónica, SEPI posee un 10%, CriteriaCaixa un 9,99% y STC un 9,97%. Esto da como resultado un control conjunto del 29,96% del capital de la empresa, lo que coloca a estas entidades en una posición clave para influir en las decisiones estratégicas de Telefónica.
Esta concentración de poder en manos de varios actores con intereses significativos en la compañía ha generado inquietud en el mercado, y el IC-A busca aclarar si se cumplen las normativas sobre la obligación de lanzar una opa en este contexto.