El Ministerio de Industria y Turismo ha anunciado la apertura de la segunda convocatoria del PERTE Chip, cuyo objetivo consiste en impulsar proyectos innovadores en el ámbito de la microelectrónica.
El Gobierno lanza la segunda convocatoria del PERTE Chip con 110 millones
El Ministerio de Industria y Turismo ha anunciado la apertura de la segunda convocatoria del PERTE Chip, cuyo objetivo consiste en impulsar proyectos innovadores en el ámbito de la microelectrónica.
Esta iniciativa contará con 110 millones de euros de presupuesto y se dirige específicamente al fortalecimiento de la cadena de valor de los semiconductores en España. Las entidades que quieran presentarse tendrán hasta el próximo 31 de enero de 2025 para presentar sus solicitudes.
La nueva convocatoria se articula en torno a dos secciones. Por un lado, se contempla un presupuesto de 90 millones de euros para Proyectos Importantes de Interés Común Europeo (IPCEI), enfocados en fomentar colaboraciones entre entidades de diferentes países miembros de la Unión Europea. Por otro, se reserva una partida específica para proyectos de microelectrónica, que representa la sección que acaba de iniciarse. Se busca así apoyar el desarrollo de soluciones tecnológicas relacionadas con el diseño y la producción de chips, con la finalidad de reforzar la autonomía estratégica tanto a nivel nacional como comunitario.
El PERTE Chip, en su primera convocatoria, adjudicó ayudas por un importe de 65,4 millones de euros. Esa experiencia previa sirvió para consolidar las bases del ecosistema español de semiconductores y para testar el interés de las compañías en un sector que resulta crítico para la innovación en áreas como la computación de alto rendimiento, las redes de telecomunicaciones y la industria de la automoción. El plan general persigue fomentar las capacidades de fabricación, la I+D y el diseño de componentes avanzados, al tiempo que alienta la aparición de nuevos actores en el mercado.
En este contexto, la segunda convocatoria del PERTE Chip se presenta como una oportunidad para que empresas, centros de investigación y consorcios nacionales y europeos fortalezcan sus actividades. El Gobierno pretende atraer inversiones en infraestructuras de fabricación y estimular la colaboración con otros países de la UE, con el propósito de crear un entorno más competitivo y resiliente frente a las tensiones internacionales en el suministro de chips. Además, se busca promover la innovación en sectores que abarcan desde la computación en la nube hasta las aplicaciones del Internet de las Cosas.