Meta ha accedido a pagar 1.400 millones de dólares (unos 1.330 millones de euros) al estado de Texas (Estados Unidos) para resolver una demanda que acusaba a la compañía de utilizar tecnología de reconocimiento facial de manera ilegal para recopilar datos biométricos de millones de ciudadanos sin su consentimiento.
La demanda, presentada en 2022, fue el primer caso significativo bajo la ley de privacidad biométrica de Texas de 2009. Esta ley permite reclamar daños de hasta 25.000 dólares (23.750 euros) por cada violación.
Texas acusó a Meta de capturar información biométrica "miles de millones de veces" a través de fotos y vídeos subidos por los usuarios a la plataforma. Estos datos se utilizaban en la función gratuita "Sugerencias de etiquetas", que ya ha sido descontinuada.
El acuerdo, el mayor logrado por un estado individual en Estados Unidos, subraya el compromiso de Texas enfrentarse a las grandes compañías tecnológicas y hacerlas responsables por violaciones de la ley y los derechos de privacidad de los texanos.
Un portavoz de Meta ha mostrado su satisfacción por resolver el asunto y anticipa «oportunidades futuras para profundizar nuestras inversiones comerciales en Texas, incluyendo el potencial desarrollo de centros de datos». Sin embargo, la empresa continúa negando haber cometido actos ilícitos.
Este no es el primer caso en el que Meta se enfrenta a sanciones por problemas relacionados con la privacidad biométrica. En 2020, la compañía acordó pagar 650 millones de dólares (unos 617,5 millones de euros) para resolver una acción colectiva en Illinois, bajo una de las leyes de privacidad biométrica más estrictas del país. Al igual que en el caso de Texas, Meta negó haber actuado mal.