El banco, presidido por José Ignacio Goirigolzarri, ha comunicado la venta de su participación del 2,5% en Telefónica, una operación valorada en más de 600 millones de euros. Esta medida contrasta con los planes del holding catalán, que pretende duplicar su participación en la operadora hasta alcanzar el 10%
La desinversión de CaixaBank se ha realizado en dos partes, según el hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) al cierre del mercado. En primer lugar, se ha efectuado la liquidación mediante la entrega de acciones de contratos de permuta (swaps) que representaban el 0,97% de Telefónica. En segundo lugar, se ha vendido al mercado un 1,576% de participación directa.
Esta estrategia permitirá a CaixaBank mejorar su posición de capital. Según la entidad, con sede social en Valencia, la venta supondrá un incremento de cinco puntos básicos en el ratio de capital de máxima calidad CET1 fully loaded, sin afectar la cuenta de resultados.
La salida, por motivos financieros
CaixaBank ha completado así su estrategia de desinversiones industriales. Hace cinco años, la entidad culminó la desinversión en Repsol y ahora sigue el mismo camino con Telefónica. Esta decisión se enmarca en un contexto en el que el modelo de supervisión actual penaliza en capital las inversiones industriales de la banca. Por esta razón, muchas entidades financieras han reducido su exposición a este tipo de inversiones en la última década.
Hace cuatro años, la entidad poseía un 5% de la operadora, cifra que se ha reducido hasta el 2,5% antes de la venta reciente
La participación de CaixaBank en Telefónica ha disminuido progresivamente. Hace cuatro años, la entidad poseía un 5% de la operadora, cifra que se ha reducido hasta el 2,5% antes de la venta reciente. Esta estrategia de reducción de participación se ha llevado a cabo cuidadosamente para no influir negativamente en la cotización de Telefónica.
Durante la presentación de resultados anuales, José Ignacio Goirigolzarri aseguró sentirse “muy cómodos con nuestra participación en Telefónica". Asimismo, el consejero delegado, Gonzalo Gortázar, señaló en octubre que no gustó la forma en que Saudi Telecom Company (STC) entró en el capital de Telefónica, pero reconoció que "Telefónica es una empresa atractiva, bien gestionada, y no es de extrañar que atraiga el interés de inversores".
Por otro lado, Criteria, el brazo financiero de La Caixa y máximo accionista de CaixaBank, ha decidido aumentar su participación en Telefónica hasta el 10%. Sin la desinversión de CaixaBank, la participación conjunta habría alcanzado el 12,5%.
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