El Palacio de la Moncloa ha renovado su red encriptada, cambiando sus sistemas de cifrado tras el espionaje al jefe del Gobierno con el programa Pegasus.
El Gobierno de España ha implementado una renovación integral de sus sistemas de comunicaciones cifradas para blindar las comunicaciones de Pedro Sánchez y su equipo, tras el espionaje revelado por el uso del software Pegasus.
La Presidencia del Gobierno ha iniciado una renovación integral de sus sistemas de cifrado, incluyendo tanto la infraestructura como las aplicaciones utilizadas en los dispositivos móviles de altos cargos, con el objetivo de evitar futuros ataques cibernéticos.
Nueva infraestructura
La primera fase del plan se centra en la modernización de la infraestructura técnica de las comunicaciones cifradas de La Moncloa. Esta tarea está en manos de Epicom, una empresa pública controlada por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), especializada en comunicaciones críticas para la seguridad nacional, que está trabajando en colaboración con Indra y el Grupo Oesía, asegurando el desarrollo de tecnología nacional, una condición imprescindible en este tipo de servicios.
En paralelo, se están renovando las aplicaciones de cifrado de voz, mensajería y vídeo empleadas en los dispositivos móviles de los altos cargos. Actualmente, se utiliza Comsec, desarrollada por Indra, pero a partir de ahora, esta herramienta competirá con Secret T, una nueva solución de Telefónica que ya se emplea en el Ministerio del Interior.
Ambas tecnologías, antes de aprobar su uso, deberán ser certificadas por el Centro Criptológico Nacional (CCN), el cual depende directamente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI). Este nuevo contrato de aplicaciones de uso público se integrará con la renovación de los servicios de comunicación móvil de la Administración General del Estado, que según ha comunicado La Moncloa, será adjudicado en los próximos meses bajo criterios de seguridad más estrictos.
Proveedores de alto riesgo
Según el informe anual del Centro Criptológico Nacional, España es uno de los países más atacados por actores cibernéticos debido a su apoyo a Ucrania en el conflicto con Rusia. Entre los principales actores de riesgo figuran China, Rusia, Corea del Norte e Irán, cuyos ataques están dirigidos a organismos gubernamentales, infraestructuras críticas y empresas tecnológicas.
Por ese motivo, a pesar de que el Gobierno aplica con rigor los criterios establecidos en el Esquema Nacional de Seguridad de Redes y Servicios 5G para evitar injerencias externas y sin que España haya oficializado un veto explícito, los componentes de Huawei y ZTE ya están siendo excluidos de las áreas más sensibles.
De este modo, y pese a las evidencias de componentes de origen chino en antenas de comunicación dentro del complejo de La Moncloa, esta estrategia de retirada de dispositivos de origen asiático, busca evitar conflictos diplomáticos con China.
Respuesta al ataque
El cibercrimen se ha intensificado con un incremento de hasta el 200% en ataques a dispositivos móviles durante 2023 y para el Gobierno, los programas de espionaje dirigidos a estos dispositivos se han convertido en una de las principales preocupaciones tras una nueva alerta lanzada por el Gobierno francés de Emmanuel Macron.
Por ello, la renovación de los sistemas de cifrado de La Moncloa responde a la necesidad de proteger las comunicaciones gubernamentales en un contexto de crecientes amenazas cibernéticas.
Estas medidas, junto con la implementación de tecnologías nacionales y posibles restricciones a proveedores de alto riesgo, buscan garantizar la seguridad de las comunicaciones en un entorno cada vez más complejo y hostil.
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