Un jurado en San Francisco le ha declarado no culpable de todos los cargos, en una sorprendente victoria para Lynch, al que se le acusaba de inflar el valor de Autonomy antes de su venta.
Lynch, quien enfrentaba más de 20 años de prisión si era condenado, negó los cargos y subió al estrado para defenderse. En su testimonio, afirmó que su enfoque siempre estuvo en la tecnología, no en la contabilidad, y se distanció de otros ejecutivos, incluido el ex director financiero de la compañía, quien ya había sido procesado con éxito por fraude.
"Estoy encantado con el veredicto de hoy y agradecido con el jurado por su atención a los hechos durante las últimas diez semanas"
"Estoy encantado con el veredicto de hoy y agradecido con el jurado por su atención a los hechos durante las últimas diez semanas", asegura Lynch en un comunicado. "Espero con ansias regresar al Reino Unido y volver a lo que más amo: mi familia e innovar en mi campo", apunta el magnate.
Qué es Autonomy
Mike Lynch cofundó Autonomy en 1996 a partir de un grupo de investigación especializado en software llamado Cambridge Neurodynamics. Bajo su liderazgo, la empresa creció hasta convertirse en una de las compañías más grandes del Reino Unido.
Autonomy, conocida por su software capaz de extraer información útil de fuentes "no estructuradas" como llamadas telefónicas, correos electrónicos o vídeos, fue vendida a HP en 2011 en un acuerdo que en su momento se convirtió en la mayor adquisición de una empresa tecnológica británica, generando 500 millones de libras para Lynch.
Sin embargo, solo un año después, HP redujo el valor de Autonomy en 8.800 millones de dólares, lo que desencadenó años de batallas legales. El director financiero de la compañía, Sushovan Hussain, fue declarado culpable de fraude en 2018 y posteriormente condenado a cinco años de prisión.
Los fiscales estadounidenses presentaron cargos contra Lynch en 2018, acusándolo de inflar el valor de la empresa mediante acuerdos retroactivos
En este sentido, los fiscales estadounidenses presentaron cargos contra Lynch en 2018, acusándolo de inflar el valor de la empresa mediante acuerdos retroactivos para engañar sobre las ventas de la compañía, ocultar el negocio no rentable de reventa de hardware y de intimidar o sobornar a quienes planteaban inquietudes. Lynch finalmente fue extraditado después de que un juez del Reino Unido fallara a favor de HP en un caso civil similar en 2022, en el que HP busca recuperar 4.000 millones de dólares.
Durante el juicio, que comenzó en marzo en San Francisco, los fiscales llamaron a docenas de testigos, incluido el exdirector de HP, Leo Apotheker, quien fue despedido poco después del anuncio de la compra. Sin embargo, los argumentos no convencieron al jurado. El equipo de Lynch argumentó que HP no realizó una debida diligencia adecuada en el acuerdo y que gestionó mal la adquisición, mientras que Lynch testificó que no estaba involucrado en las transacciones descritas.
El juez Charles Breyer ya había desestimado un cargo de fraude de valores durante el juicio por falta de pruebas. Por su parte, Abraham Simmons, portavoz de la Oficina del Fiscal de Estados Unidos, asegura que “reconocemos y respetamos el veredicto. Agradecemos al jurado por su atención a las pruebas presentadas por el gobierno en este caso".