El ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, Óscar López, ha viajado a Ámsterdam para participar en la reunión ministerial del foro D9+, un encuentro que agrupa a los trece países más avanzados en digitalización de la Unión Europea.
Este foro tiene como objetivo coordinar políticas digitales para garantizar que la legislación comunitaria fomente la innovación, el crecimiento económico y la ciberseguridad en el continente.
Durante su intervención, Óscar López ha defendido la necesidad de fortalecer la soberanía tecnológica europea mediante una mayor inversión en tecnología digital. "Europa debe invertir en Europa" ha sido el mensaje central de su discurso, en el que ha subrayado la importancia de una regulación que incentive la innovación sin descuidar los derechos humanos y el bienestar ciudadano.

Los países del D9+ han firmado una declaración conjunta en la que instan a incrementar la inversión en tecnologías digitales, destacando la IA, los semiconductores, la computación cuántica, la ciberseguridad y el procesamiento de datos como áreas prioritarias. Asimismo, se han comprometido a reducir barreras burocráticas, mejorar el acceso a financiación para startups y fomentar la inversión del Banco Europeo de Inversiones en el sector digital.
Financiación y conectividad: pilares del futuro digital
Uno de los puntos clave del foro ha sido la discusión sobre las oportunidades de financiación para potenciar la digitalización en Europa. En este sentido, López ha destacado la importancia de la colaboración público-privada, mostrando como ejemplo la creación en España de la Sociedad Española de Transformación Tecnológica (SETT) como un modelo de éxito. Este organismo, dotado con 16.000 millones de euros, tiene como objetivo coinvertir en proyectos de alto valor tecnológico y acelerar la adopción de soluciones digitales en diversos sectores.
La conectividad también ha sido un tema central en las discusiones del foro. El desarrollo de infraestructuras digitales eficientes es fundamental para garantizar el acceso a tecnologías avanzadas en toda Europa. En este contexto, se han analizado estrategias para impulsar redes de alta capacidad y mejorar la resiliencia digital del continente.