Utilizar la verificación en dos pasos
Es una forma de duplicar la seguridad y, así, habrá dos filtros: la contraseña y otro que nos enviarán a nuestro teléfono móvil. Si habilitamos esta opción, Google nos enviará un código de acceso a nuestro teléfono cuando alguien intente acceder a nuestra cuenta de correo desde un ordenador desconocido.
Cuanto más larga y compleja sea la contraseña, más difícil será de adivinar
Contraseñas más seguras
Este consejo lo hemos oído mil millones de veces, pero seguro que aún seguimos utilizando alguna contraseña que sabemos que no es del todo segura. Es esencial para nuestra seguridad elegir una clave para cada una de nuestras cuentas y es altamente recomendable cambiarlas de forma periódica. Cuanto más larga y compleja, más difícil será de adivinar y la presencia de números, símbolos o mayúsculas dificultará el proceso.
Comprobar el estado de seguridad de las cuentas
Se trata de uno de los consejos en los que más insisten desde Google. Desde el apartado “Mi Cuenta” de Google es muy sencillo estar al día de los datos que compartimos y del estado de nuestra seguridad. De esta manera, podremos controlar las búsquedas realizadas, activar o desactivar la geolocalización o controlar qué anuncios queremos ver según nuestros intereses.
Permitir que el navegador gestione nuestras contraseñas
Si usamos la misma contraseña para diferentes sitios web y algún ciberdelincuente se hace con alguna de ellas, estamos perdidos. Pero podemos evitarlo. Algunos navegadores, como Chrome, nos permiten recordar nuestras contraseñas y nos sugieren algunas que son los suficientemente seguras. De esta manera, no tendremos que recordarlas y podremos utilizar claves más complicadas y, por tanto, mucho más seguras.