La Policía Nacional y la Guardia Civil han desarticulado una organización criminal que defraudó 429.000 euros mediante técnicas de ciberestafa y usurpación de identidad.
El Ministerio del Interior ha informado este miércoles sobre la operación que permitió desmantelar una red delictiva integrada en su mayoría por miembros de la banda Trinitarios. La investigación, iniciada en diciembre de 2021 tras dos denuncias presentadas en Cáceres, permitió detener a 20 personas, 16 en España y cuatro en Suiza y bloquear transferencias por valor de 95.000 euros antes de que fueran desviadas al extranjero.
SIM Swapping y malware
La organización utilizaba el método conocido como SIM Swapping, que consiste en duplicar las tarjetas SIM de las víctimas sin su consentimiento, lo que les permitía interceptar comunicaciones bancarias y acceder a sus fondos mediante códigos de verificación enviados por SMS. Antes de esto, obtenían las credenciales bancarias instalando malware en los dispositivos informáticos de las víctimas.
Con esta información, los delincuentes abrían cuentas bancarias con identidades usurpadas y documentación falsificada para transferir grandes sumas de dinero y ocultarlas en cuentas controladas por la organización en Suiza. Según el Ministerio del Interior, se rastrearon movimientos financieros por más de un millón de euros, incluyendo transferencias de más de 70.000 dólares hacia cuentas en Suiza, así como compras de criptomonedas y extracciones de efectivo.
Durante los 14 registros realizados en Tarragona, Barcelona y Suiza, se incautó un arsenal que incluía un subfusil, tres escopetas, un rifle inutilizado y tres pistolas detonadoras, además de dispositivos electrónicos y documentación falsificada. Entre los objetos intervenidos destacan 47 teléfonos móviles, cuatro tabletas, siete ordenadores portátiles, tarjetas bancarias en blanco, una copiadora de banda magnética y dispositivos de enmascaramiento de voz.
Los arrestados enfrentan acusaciones por los delitos de estafa, blanqueo de capitales, falsedad documental, usurpación de identidad, revelación de secretos y pertenencia a organización criminal. La operación ha sido coordinada por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Plasencia y el número 4 de Burgos.