Renault Group y WeRide han dado un paso adelante en la movilidad autónoma con la presentación de su estrategia para el transporte público en Barcelona.
Como parte de esta iniciativa, han lanzado un servicio experimental de minibuses autónomos que operará en la ciudad de forma gratuita hasta el 14 de marzo. Este proyecto cuenta con la autorización del Ajuntament de Barcelona y la Dirección General de Tráfico, y tiene como objetivo demostrar la madurez de la tecnología autónoma en un entorno urbano real.
El minibús recorrerá un trayecto circular de más de dos kilómetros con cuatro paradas clave, facilitando a los ciudadanos la posibilidad de experimentar esta tecnología en condiciones reales de tráfico. La iniciativa también refuerza la visión de Renault Group sobre la movilidad urbana del futuro: accesible, eficiente y sostenible.

Experimentos previos y expansión en Europa
El compromiso de Renault Group con la movilidad autónoma ya se ha testado en escenarios internacionales. En mayo de 2024, durante el torneo de tenis Roland-Garros, la compañía puso en circulación dos minibuses autónomos en un entorno de tráfico real. Con más de 1.000 kilómetros recorridos y alrededor de 700 pasajeros transportados, la prueba demostró la viabilidad de esta tecnología.
El éxito del experimento ha despertado el interés de autoridades locales y operadores de transporte en diversas ciudades europeas. Actualmente, se desarrollan proyectos similares en Zúrich (Suiza), Valence (Francia) y Barcelona, con nuevas iniciativas en proceso de planificación.

Conectividad en zonas periurbanas
Uno de los proyectos más ambiciosos de Renault se está llevando a cabo en Valence (Francia). Desde el 10 de marzo hasta el 19 de abril, se está realizando una fase experimental que culminará con el lanzamiento de un servicio comercial de minibuses autónomos en julio de 2025.
Este sistema de transporte de nivel L4 conectará la estación de tren Valence TGV con una zona empresarial de 162 hectáreas, beneficiando a 150 empresas y a más de 3.000 empleados. Se trata de una solución diseñada para mejorar la conectividad en entornos periurbanos, facilitar el acceso al empleo y reducir el impacto ambiental del transporte.
Mientras tanto, en el aeropuerto de Zúrich, WeRide está desarrollando un experimento desde enero de 2025 para mejorar la movilidad interna de los empleados. Este proyecto busca demostrar la viabilidad de los vehículos autónomos en espacios de alta seguridad, cumpliendo con estrictos estándares operativos.
La estrategia de Renault en vehículos autónomos
Renault ha adoptado un enfoque diferenciado en el desarrollo de vehículos autónomos, segmentando sus esfuerzos entre el transporte particular y el público. Para los primeros, la compañía se centra en Sistemas Avanzados de Asistencia al Conductor (ADAS) de nivel L2 y L2+, mejorando la seguridad y la comodidad sin eliminar la responsabilidad del conductor.
En el transporte público, la estrategia está orientada a la implementación de minibuses autónomos de nivel L4. Estos vehículos pueden operar de manera independiente en entornos definidos, con supervisión remota pero sin la necesidad de un operador a bordo. Con la proliferación de zonas de bajas emisiones en las ciudades, se prevé una creciente demanda de soluciones de transporte flexibles y sostenibles en la próxima década.
Renault también tiene previsto el lanzamiento de una plataforma de minibuses eléctricos robotizados para 2030, consolidando su posición en la movilidad autónoma y la transición hacia un transporte sin emisiones.