Apple se enfrenta a una demanda por eliminar contenido musical de sus dispositivos cuando era de terceros. Cualquier compra no realizada en iTunes ocasionaba un error en dispositivos como el iPod, que hacía que automáticamente se tuviera que restaurar el dispositivo.
Según la acusación, la situación sucedía cuando después de adquirir una canción en un servicio externo a iTunes, Amazon, por ejemplo, los usuarios intentaban transferir esa compra, entonces iTunes daba error, el iPod se colapsaba tenía que ser restaurado. Una vez cumplido este procedimiento, la canción había desaparecido como por arte de magia.
Según ha explicado Apple en el juicio, su único objetivo era cuidar a los usuarios de ataques e intentos de hackeo desde iTunes. Augustin Farrugia, director de Apple, dijo que “no necesitamos dar a los usuarios demasiada información (...) no queremos confundirlos”.
La demanda está en curso. Se especula que Apple tendría que pagar unos 350 millones de dólares.