Según el equipo de Eset, en diciembre todavía coleaba el conocido como 'caso de las fotos de las chicas de Deusto', un bulo que voló por la Red y que incluía una colección de fotos eróticas que tenía como origen una intrusión en la red WiFi de la prestigiosa universidad de los Jesuitas desde la cual, se abrían obtenido datos y fotos de las estudiantes del campus vasco.
Este hecho, que tuvo en vilo a muchas personas durante varios días hasta que se desveló que no hubo ningún robo de información en los móviles de los estudiantes, demostró la facilidad con la que se puede propagar un bulo y que demostró que lejos de bajar la guardia sólo por el hecho de que, en esta ocasión, ninguna de las fotos difundidas se correspondiese con estudiantes de Deusto, se debe estar muy alerta, proteger nuestros dispositivos y, sobre todo seleccionar bien nuestras fuentes de información tanto en Internet, como en cualquiera de las redes sociales y atender a las políticas de privacidad de éstas.
De todos los internautas es conocida la facilidad con que hoy en día se inventan o suponen informaciones bien falsas,
Sólo un 1% votó en Facebook
El manejo de nuestros datos personales y de la información que publicamos en las redes sociales también dio mucho que hablar el mes pasado. Primero Facebook anunció cambios en sus políticas de privacidad tras haber finalizado el periodo de consulta en el que los usuarios teníamos derecho a opinar sobre si queríamos que se mantuviesen las políticas actuales o aceptábamos cambios. Al no haber votado el 30% mínimo (se estima que la participación apenas llegó al 1 %) Facebook asume que está en su derecho de cambiar estas políticas de privacidad a su antojo sin que los usuarios puedan reclamar.