Buque insignia del fabricante francés, el Sagem My-X8 es un terminal que da mucho juego y, dentro de una operatividad sencilla, tiene muchos detalles. Formas redondeadas, el encanto del ‘savoir faire’ y una pantalla espectacular.
Lo primero que llama la atención al coger entre las manos el Sagem MyX-8 es que está firmado. Exactamente en su lateral izquierdo, grabado y remarcado, aparece una leyenda que dice: design by ora-ÿto. Y motivos parece que no le faltan a la marca, ya que este francés, cuyo nombre tiene sabor asiático es uno de los mejores diseñadores del mundo que se dio a conocer plagiando las marcas líderes y parodiando la sociedad de consumo al utilizar objetos de firmas conocidas para realizar diseños emblemáticos. Ha trabajado para Lóréal, Vogue, Heineken, Adidas, Kenzo, AIR Group, Honda, Guerlain, Swatch y Nike -entre otros- y ha recibido numerosos galardones internacionales a pesar de tener sólo 27 años. Así, si unimos el cuidado diseño al altísimo nivel tecnológico que presenta este nuevo teléfono de la marca francesa, entendemos que fuera la bandera con que se presentó Sagem la pasada primavera en la 3GSM de Cannes, donde ejerciendo de profeta en su tierra - su cuota de ventas en Francia es muy alta-, presumía de su operatividad y de la calidad de sus fotografías, que mostraban impresas y que resultaban sorprendentes. Al diseño de barra con antena integrada y doble faz, teléfono/cámara, el fabricante ha unido una óptica con un sensor digital CCD, resolución de 1.3 Megapíxeles, zoom 8x, flash y espejo para autorretrato, todo ello localizado en una trasera fabricada con doble material y color en contraste (plata y balanco). La utilización de la cámara es muy sencilla, ya que se enciende en el menú principal y luego sólo permite activar el temporizador o variar el zoom con el botón navegador. Los preajustes para determinar cómo queremos que sea nuestra captura se realizan desde el submenú de ajustes, donde podemos elegir el tiempo del temporizador (segundos que deben transcurrir desde que pulsemos hasta que se dispare la foto), el sonido del clic, el formato de la imagen (tamaño) y la calidad de la misma. Conviene tener en cuenta que los mensajes multimedia tienen un límite de 300 k de peso y que conviene que no superen los 100 k para asegurarnos la recepción; así, el tamaño de la imagen elegido debe ser el adecuado.
Frontal Visto de frente y una vez encendido (tecla doble colgar/encendido), impone la calidad de la imagen que aparece en una pantalla de tamaño muy interesante con nueve líneas de texto, magnífica resolución y brillo. Todo el panel frontal lleva un protector plástico en el que se abre el altavoz y un primer conjunto de cinco botones: dos accesos directos configurables, el pulsador verde de llamada y registro, el rojo antes mencionado y un botón navegador multidireccional desde el cual se accede al menú principal. Así mismo, nos facilita el movimiento a través de éste y de los submenús y nos permite aceptar la opción seleccionada sin necesidad de pulsar el comando ‘entrar’. Para configurar las llamadas ‘soft keys’ debemos ir al menú principal > ajustes > acc. directos y allí programar primero la tecla izquierda eligiendo una, entre las muchas opciones que se nos ofrecen, y luego repetir la operación con la derecha. La agenda, la cámara o la activación/desactivación de Bluetooth, son algunas de las asignaciones más prácticas. Siguiendo con el frontal, resta mencionar un teclado alfanumérico de doce botones, algunos de los cuales son multifunción, dependiendo de la pantalla de menú en que nos situemos. Los tres últimos son especialmente útiles a la hora de escribir mensajes. Antes de entrar en el menú, sólo señalar que en el lateral derecho está el puerto de infrarrojos y en el izquierdo hay un asa cuya finalidad es pasar cómodamente los colgadores.
Menú Doce iconos dinámicos componen un menú sencillo e intuitivo que no alberga recovecos y por el que resulta muy agradable desplazarse, ya que la presentación es cálida y original. De izquierda a derecha y de arriba abajo: juegos, mensajes, organizador, reproductor de audio, WAP, agenda, vídeo, cámara, aplicaciones, multimedia, conectividad (lleva Bluetooth e infrarrojos) y ajustes. Dentro de aplicaciones podemos encontrar el despertador, temporizador, tareas, servicios del operador, calculadora, convertidor y applets (pertenece al sistema). Por lo demás, el corazón y los secretos del My-X8 se esconden, como suele ser habitual, en el menú de ajustes, primer lugar que debemos visitar y conocer a fondo para sacar el mayor partido a nuestro teléfono. Allí, podemos, por ejemplo, entrar en sonido y asignar melodías a cada una de las funciones, activar o desactivar el vibrador, silenciar el terminal, elegir los bips (teclado, señal de batería baja, etc.), o realizar una grabación que posteriormente podremos utilizar. Otro tanto se puede hacer con la pantalla en cuanto a regular el ahorrador de energía, personalizar con diferentes diseños, elegir salvapantallas, fondos... También es el lugar para decidir todo lo referente a las opciones de llamada que nos ofrece el operador o seleccionar uno de los trece idiomas registrados para el funcionamiento del sistema. Sólo señalar que hay que ser ágil, porque tiene una capacidad de retorno muy rápida y vuelve en pocos segundos y de forma automática a la pantalla de reposo. A la hora de escribir o leer un mensaje, el My-X8 nos permite seleccionar entre dos tamaños de texto, por si uno nos resultara muy pequeño. Basta con pulsar el botón inferior derecha del teclado para que éste cambie. Si nos fijamos, en el mencionado pulsador viene serigrafiada una lupa indicativa.