Telefónica se prepara para una nueva era tecnológica con un enfoque decidido en la automatización, la desagregación y la cloudificación de sus redes. Enrique Blanco, ex CTO de Telefónica, y Andrea Folgueiras, quien asume el cargo, explicaron en el MWC cómo la compañía continuará su evolución tecnológica con el objetivo de mejorar la experiencia del cliente, impulsar la innovación y mantener la seguridad de sus infraestructuras. En una transición que marca el futuro de la conectividad en España y otros mercados, Telefónica reafirma su liderazgo en despliegue de fibra, 5G y tecnologías emergentes.
Enrique Blanco destacó el trabajo realizado en los últimos años, recordando cómo Telefónica fue pionera en la expansión masiva de fibra óptica y en la transición hacia redes virtualizadas y softwareizadas. Hoy, para Blanco, la compañía se encuentra en una posición envidiable a este respecto, con una cobertura de fibra en España equiparable a la de países líderes en conectividad como Corea del Sur y China. Además, su estrategia de 5G se centra en la calidad de la cobertura y en la preparación para el standalone, de forma que se asegura una experiencia superior para los usuarios.
La nueva CTO, Andrea Folgueiras, asume el reto con un enfoque basado en tres pilares fundamentales: la cloudificación, la desagregación y la automatización. Según Folgueiras, la estrategia de Telefónica se fundamenta en trasladar toda su arquitectura a la nube, implementar redes desagregadas que otorguen mayor flexibilidad y eficiencia, y avanzar en la automatización mediante inteligencia artificial (IA).
La evolución de la conectividad: fibra y 5G
Si Telefónica lidera en Europa con su red de fibra óptica, ahora apuesta por el despliegue de XG-PON y 10G-PON, tecnologías que aumentarán significativamente la velocidad de conexión en los hogares. Esto, sumado a la implementación de Wi-Fi 7 y futuras innovaciones como Wi-Fi 8, permitirá una experiencia de conectividad superior.
En el acceso móvil, la compañía continuará con el despliegue del 5G avanzado (Releases 18 y 19), mejorando la eficiencia espectral y energética, y ampliando su cobertura. La desagregación también se extiende a la red de transporte, con una fuerte apuesta por Software Defined Networks (SDN), que facilitará una mayor flexibilidad y rapidez en la implantación de servicios.
Uno de los proyectos más ambiciosos de Telefónica, según explican los CTOs, es la evolución hacia redes autónomas, un proceso que busca reducir la intervención humana en la gestión de la infraestructura. Actualmente, la compañía se encuentra en un nivel intermedio en la escala de automatización, con el objetivo de alcanzar un ‘grado 4’ en el corto plazo. Esto implica una mayor integración de inteligencia artificial (IA) aplicada a la gestión de redes, lo que optimizará procesos de mantenimiento, prevención de fallos y respuesta a incidentes en tiempo real.
Además, Telefónica trabaja en la monetización de sus redes a través de iniciativas como network slicing y edge computing, tecnologías que permiten ofrecer servicios diferenciados a clientes empresariales y optimizar la latencia en aplicaciones críticas.
Otro eje clave es la seguridad. Telefónica está implementando modelos de Zero Trust, que evolucionan desde una visión perimetral hacia una seguridad intrínseca en toda la red. La compañía también ha creado un Centro de Excelencia en Tecnología Cuántica, con el objetivo de anticiparse a las amenazas de la computación cuántica sobre los métodos de cifrado tradicionales.
El futuro de Telefónica está marcado por la transformación continua. Con una visión clara hacia la cloudificación, la desagregación, la automatización y la seguridad, la compañía busca consolidarse como un líder tecnológico en un mundo cada vez más digitalizado. Andrea Folgueiras asume su nuevo rol con el reto de llevar a Telefónica a la siguiente fase de innovación y excelencia en conectividad y procurará que la empresa “continúe ofreciendo la mejor experiencia a sus clientes y que mantenga su posición en la vanguardia de las telecomunicaciones”.