A pesar de su impresionante capacidad, el robot aún está en fase de pruebas y se lanzará en 2025 con una edición limitada de 279 unidades. Su diseño anatómico preciso y su capacidad para replicar movimientos humanos lo posicionan como un competidor directo de Optimus, el robot de Tesla, aunque con un enfoque más avanzado en cuanto a la precisión del movimiento.
Mientras Optimus ya está a la venta por 30.000 dólares y se usa para tareas cotidianas, Protoclone está orientado a ser un asistente más complejo, con aplicaciones potenciales en sectores como la salud y la robótica industrial.