Esta decisión llega después de varios años de trabajo y varios problemas internos y externos que han dificultado el progreso del proyecto. La responsabilidad del desarrollo ahora recaerá en Anduril Industries, una empresa fundada por Palmer Luckey, fundador de Oculus Rift.
En 2018, Microsoft firmó un contrato con el Ejército de EE. UU. para desarrollar visores de realidad mixta que serían utilizados en el campo de batalla. La tecnología HoloLens iba a ser la base de estos cascos, pero a pesar de los avances, el proyecto ha estado marcado por una serie de contratiempos. Uno de los momentos más críticos ocurrió en octubre de 2022, cuando un informe reveló que más del 80% de los soldados que probaron el dispositivo experimentaron efectos secundarios negativos, como náuseas, dolores de cabeza y malestares físicos. A estos problemas les siguieron las quejas sobre la confiabilidad del dispositivo y una baja aceptación entre el personal militar.
Microsoft dejará de fabricar los HoloLens 2 y finalizará su soporte en diciembre de 2027
Además de los problemas técnicos, el proyecto ha estado bajo la presión de la opinión interna. En 2019, un grupo de empleados de Microsoft se opuso abiertamente a la militarización de la tecnología HoloLens, lo que generó un debate ético dentro de la compañía. A pesar de estos inconvenientes, el contrato que Microsoft había firmado con el Pentágono tenía un valor potencial superior a los 20.000 millones de dólares, por lo que la empresa decidió continuar con su desarrollo, aunque sin obtener la aceptación esperada.
La salida de Microsoft de este contrato coincide además con un lento abandono del negocio por parte del gigante estadounidense. Sin un anuncio oficial al respecto, los planes de la compañía sobre HoloLens parecen llegar a su fin, ya que la empresa ha anunciado que dejará de fabricar los HoloLens 2 y finalizará su soporte en diciembre de 2027.
A pesar de su salida del proyecto, Microsoft no abandona completamente la iniciativa. La compañía sigue siendo responsable de los servicios de inteligencia artificial y computación en la nube a través de su plataforma Azure, que se utilizará para las cargas de trabajo del IVAS.
Sin embargo, Anduril Industries, una firma que ha ganado peso en los últimos años en el sector militar por sus desarrollos tecnológicos relacionados con drones, asume ahora el liderazgo en el desarrollo y fabricación de los visores de realidad mixta.
Esta compañía, bajo la dirección de Palmer Luckey, es conocida por sus avances en el campo de la tecnología para aplicaciones militares, y ahora se enfrenta al desafío de asumir un programa de gran envergadura como IVAS. Luckey, en su blog personal, ha destacado que el programa representa un paso hacia la mejora humana, que permitirá a los combatientes superar las limitaciones físicas y cognitivas a través de la integración de humanos mejorados con robots y sistemas biológicos.