El despliegue de esta tecnología, que arrancó en septiembre de 2020, ha experimentado un crecimiento constante, pasando de un nivel de cobertura cercano al 78% en sus inicios hasta la cifra actual. Este progreso se refleja en la extensión de la red por todo el territorio, con especial incidencia en zonas donde antes resultaba complicado acceder a conexiones de alta velocidad.
Una de las claves es la cobertura de 1.500 municipios mediante la banda de 3,5 GHz, considerada de altas prestaciones por sus velocidades y su baja latencia. Este incremento, superior al 50% en los últimos seis meses. La importancia de este logro radica en la posibilidad de ofrecer un servicio 5G+ que permite navegar, descargar contenidos y trabajar en línea con mayor agilidad, tanto en núcleos urbanos como en regiones rurales. Además, el ancho de banda de 3.500 MHz abre la puerta a aplicaciones profesionales y empresariales que exigen una conectividad fiable y de gran capacidad.
A la vez, Telefónica continúa su impulso en la banda de 700 MHz, que ya alcanza 3.585 municipios. Esta frecuencia se caracteriza por mejorar la cobertura en interiores y ofrecer un alcance mayor en exteriores, lo que resulta beneficioso para ampliar la disponibilidad de la 5G a lugares de difícil acceso.