Con esta adquisición, la empresa pone en marcha una operación que busca redefinir el panorama de la industria de impresión. La fusión permite a ambas compañías consolidar su presencia global, ampliar su portafolio de productos y servicios, y lograr importantes sinergias financieras y operativas.
Este movimiento refuerza la posición de Xerox en el mercado de impresión y servicios gestionados, ampliando su alcance global y adaptándose a las necesidades de los entornos de trabajo híbridos.
“La adquisición de Lexmark une a dos líderes de la industria con valores compartidos y fortalezas complementarias, creando una organización más fuerte y preparada para afrontar los desafíos del sector”, afirma Steve Bandrowczak, director ejecutivo de Xerox.
Con esta integración, la compañía busca consolidar su liderazgo, y avanzar en su estrategia de reinvención y para ello, Lexmark, reconocida por su tecnología de impresión y multifuncionales de alta calidad, complementa perfectamente la oferta de Xerox.
La integración de las soluciones de Lexmark con la tecnología ‘ConnectKey’ de Xerox permitirá a ambas compañías desarrollar un portafolio en común más robusto con productos y servicios combinados, posicionándose como una de las cinco principales compañías en los mercados de impresión de entrada, media y producción.
Además, la operación amplía la capacidad de ambas empresas para atender el creciente mercado de impresión a color en formato A4, lo que logra diversificar su presencia geográfica y su red de distribución. Juntas, Xerox y Lexmark buscan dar servicio a más de 200.000 clientes en 170 países, con el respaldo de 125 instalaciones de fabricación y distribución en 16 países.
Allen Waugerman, CEO de Lexmark, ha destacado que, “Lexmark y Xerox juntas serán aún mejores, ampliando su alcance y fortaleciendo su propuesta de valor para los clientes”.
La transacción es una estrategia de mercado para ampliar las capacidades de ambas compañías, sino que también trata de generar beneficios financieros inmediatos. Los líderes de las empresas y sus principales inversores esperan que la adquisición incremente las ganancias por acción y mejore el flujo de caja libre de Xerox desde el primer momento. Por su parte, la compañía estima más de 200 millones de dólares en sinergias de costes durante los dos años posteriores al cierre, lo que permitirá reducir su deuda neta proforma y fortalecer su balance financiero actual.
Además, para lograr financiar esta adquisición, Xerox ha decidido combinar su efectivo disponible con financiación de deuda comprometida, mientras que la Junta Directiva ha aprobado un cambio en la política de dividendos, reduciendo el pago anual por acción de 1 dólar a 0,50 dólares.
Está reducción del 50% busca darle prioridad a la reducción de deuda y garantizar la sostenibilidad financiera a largo plazo.