Aunque esta política ha sido objeto de debate, el operador la justifica como una medida para mantener sus niveles de inversión en infraestructura de red y garantizar la calidad del servicio.
Esta nueva subida del 3% es la tercera consecutiva que aplica Vodafone desde la introducción de esta cláusula. En 2023, los precios subieron un 6,8%, y en 2024, un 4,8%. Para 2025, el ajuste será proporcional al IPC promedio entre septiembre de 2023 y octubre de 2024, lo que se traduce en un incremento medio de 0,6 euros al mes para tarifas exclusivamente móviles y de 2,5 euros para paquetes convergentes que combinan fibra y móvil.
En un intento por compensar la subida, Vodafone ha decidido ofrecer a sus clientes una serie de beneficios personalizados, diseñados para adaptarse a sus necesidades específicas. Estos podrán activarse a través de la aplicación MiVodafone a partir del 1 de enero, como la incorporación de AMC+, un servicio de streaming premium valorado en 48 euros anuales, que incluye series, películas y documentales exclusivos sin publicidad.
También se ofrecerá SecureNet, una solución de ciberseguridad valorada en 12 euros al año, que protege tanto dispositivos móviles como conexiones fijas; así como dispositivos gratuitos, como auriculares o smartwatches, con un valor de hasta 100 euros.
Por otro lado, se incorporará en algunas tarifas Vodafone TV, con acceso a más de 70 canales de televisión, incluyendo Canal Hollywood, National Geographic y Eurosport, valorado en 60 euros anuales.
El aumento no afectará a todos los usuarios. Los clientes que contrataron nuevos planes a partir de julio de 2024, así como los que están suscritos a tarifas sociales o utilizan los servicios de Lowi, no verán cambios en sus facturas.