Este desarrollo permite a los usuarios encontrar los auriculares más adecuados para la forma del oído sin necesidad de pruebas físicas, proporcionando recomendaciones personalizadas que buscan mejorar la comodidad y la experiencia auditiva.
La tecnología detrás de JBL TWS Fit Checker se basa en el análisis de preferencias y un escaneo de la forma de la oreja del usuario. A través de una aplicación web, el sistema realiza un proceso que comienza con una serie de preguntas sobre las preferencias de uso y sonido.
Tras eso, el usuario utiliza la cámara de su dispositivo para escanear sus orejas mediante un enlace específico al sitio de JBL, donde el sistema analiza los datos y sugiere el modelo de auriculares más adecuado entre tres opciones: Buds, Beam y Flex. Este proceso permite una recomendación precisa que se adapta a las características anatómicas de cada persona, eliminando la necesidad de probar varios modelos físicamente.
Esto se logra mediante un algoritmo que compara los datos del escaneo con una base de datos de diferentes perfiles de orejas, garantizando una personalización que antes solo era posible con pruebas físicas.
JBL ha identificado que la forma de los oídos y las preferencias de escucha varían ampliamente, y para adaptarse a esta diversidad, la marca ha dividido los modelos entre tres tipos diferentes que se ajustan a las características anatómicas.
Esta segmentación responde a la necesidad de personalización en el uso de dispositivos de audio, asegurando que cada usuario encuentre un modelo adecuado a su anatomía, lo cual es clave para disfrutar de la música o de cualquier contenido auditivo sin molestias.
Aunque el sistema está específicamente diseñado para terminar recomendando un tipo de auricular de la marca JBL, sus resultados se pueden extrapolar a otras marcas con diseños similares.