El uso de herramientas de control parental es más común en plataformas de video bajo demanda y en redes de intercambio de videos, como YouTube, TikTok, Netflix y HBO Max. En estos casos, algo más de un tercio de los hogares con menores aplicaron algún tipo de filtro de contenido. En la televisión en abierto, el 17,2 % de los hogares utilizaron el control parental, y en la televisión de pago, el 23,2 %.
El informe señala que el 86,7 % de los hogares con menores conocen los horarios de protección infantil en televisión. Esta medida es más conocida que el uso de medios de filtrado o bloqueo de contenido, conocidos por el 75,4 % de los hogares. Además, un 79 % de los hogares desconoce las vías para presentar reclamaciones o protestas sobre contenidos audiovisuales dirigidos a menores, y solo un 2,6 % de los hogares que saben de esta posibilidad han presentado alguna reclamación en los últimos dos años.
La preocupación de los hogares por la exposición de menores a ciertos contenidos es alta. Los contenidos que más preocupan son aquellos que pueden incitar a conductas peligrosas, como actos vandálicos o prácticas de riesgo. En hogares con menores de hasta 15 años, la inquietud sobre contenidos violentos es notable. En los hogares con adolescentes de 16 y 17 años, también preocupa la exposición a contenidos relacionados con el consumo de alcohol, tabaco, drogas, y actitudes discriminatorias.