La nueva filial, que inicialmente ha sido bautizada como CPD4Green, tiene como objetivo convertirse en el mayor hub europeo para albergar centros de datos y procesamiento para aplicaciones de inteligencia artificial (IA).
Se espera que el acuerdo otorgue al socio inversor hasta el 80% del capital de la nueva filial, con Iberdrola manteniendo el 20% restante
En busca de consolidar su posición en este mercado emergente, Iberdrola está negociando con algunos de los fondos de inversión más grandes del mundo, como Norges, BlackRock y KKR, para que participen en la cofinanciación del proyecto. Se espera que el acuerdo otorgue al socio inversor hasta el 80% del capital de la nueva filial, con Iberdrola manteniendo el 20% restante y asegurándose el suministro a largo plazo de electricidad para las operaciones de los centros de datos.
Iberdrola no es ajena a los grandes movimientos corporativos y con CPD4Green pretende competir directamente con los actuales líderes del mercado español, como Nabiax, filial de Telefónica, y Data4, adquirida por Brookfield a AXA el año pasado. La nueva compañía aspira a superar estos competidores mediante la creación de un hub de centros de datos altamente eficiente y sostenible, capaz de aprovechar las energías renovables que la compañía suministra.
El plan de Iberdrola incluye el desarrollo de una infraestructura de 1.000 megavatios (MW) ya en estado avanzado, con una capacidad potencial de 5.000 MW a largo plazo. Para dimensionar la envergadura de este proyecto, un solo megavatio en un centro de datos puede tener un coste de inversión de alrededor de 10 millones de euros, lo que coloca el valor inicial de CPD4Green en 2.000 millones de euros. La compañía prevé expandir esta inversión a 10.000 millones de euros a medida que el proyecto avance.
El plan de la energética se ha presentado a través de un road-show ante analistas financieros, en una presentación dirigida por David Mesonero, director de desarrollo corporativo de Iberdrola. En el encuentro, que ha reunido a más de 200 inversores, se han puesto en valor los puntos clave de la estrategia para CPD4Green y la intención de cerrar la incorporación de un socio financiero antes de mediados de 2025.
Hasta la fecha, Iberdrola ha recibido múltiples propuestas de diversos fondos, incluyendo KKR, Cinven, Antin, CVC y GIC, muchos de los cuales ya han trabajado con la energética en otros proyectos estratégicos. A diferencia de otros acuerdos de colaboración que Iberdrola ha establecido en el pasado, en esta ocasión la compañía busca otorgar la mayoría del control al socio inversor, lo que le permitirá centrarse en el suministro energético y la gestión de infraestructuras a largo plazo.