Hace solo unos días, el expresidente de Estados Unidos y candidato de nuevo a la Casa Blanca, Donald Trump, confirmaba que al senador J.D. Vance como su futuro compañero de cara a las elecciones presidenciales, un anuncio realizado en la Convención Nacional Republicana en Milwaukee y que llega apenas unos días después del intento de asesinato contra el magnate.
La noticia, sin embargo, tiene un fuerte calado e impacto en la industria tecnológica que afectará directamente al ecosistema global, debido al marcado perfil que tiene el candidato a la vicepresidencia en materia de competencia y en su lucha contra el monopolio.
Vance jugará un papel muy importante en las futuras políticas que salgan de la posible nueva Administración Trump
Sin entrar a valorar qué pasará en las futuras elecciones para las que aún quedan varios meses, aunque las recientes encuestas dan favorito al expresidente, es especialmente interesante conocer el perfil de J.D. Vance, ya que jugará un papel muy importante en las futuras políticas que salgan de la posible nueva Administración Trump.
Vance es un férreo defensor de las políticas antimonopolio y así lo ha mostrado en la última legislatura, defendiendo las acciones de Lina Khan, actual presidenta de la Comisión Federal de Comercio (FTC), y la gran enemigo política de los gigantes tecnológicos.
El candidato a la vicepresidencia ha defendido una interpretación extensa de las leyes antimonopolio en Estados Unidos, enfocándose no solo en los precios para los consumidores, sino también en el impacto en la competencia del mercado en general.
Con la apuesta de Trump por Vance, el magnate manda una clara señal a las grandes compañías, avanzando que se pondrá el foco en cuestiones tan relevantes como los monopolios tecnológicos que se han ido construyendo desde Estados Unidos con el paso de los tiempos.
El magnate republicano ha sido uno de los más duros en lo que va de siglo con las grandes tecnológicas. Durante su primer mandato, tanto la FTC como el Departamento de Justicia arrancaron grandes investigaciones contra gigantes como Meta, Amazon, Apple y Google, entre otras, por supuestas violaciones de las leyes antimonopolio.
Asimismo, Trump arrancó durante su estancia en la Casa Blanca una férrea lucha contra China y sus compañías, especialmente las tecnológicas, poniendo el foco en gigantes como Huawei, al que terminó prohibiendo trabajar con empresas de Estados Unidos (con alguna excepción como Microsoft) y forzando que se eliminaran todas los equipos de telecomunicaciones de esta empresa y de su compatriota ZTE y arrancando el veto a TikTok que ha continuado y desarrollado Joe Biden durante su presidencia.
A su lado ahora estará Vance, formado en Yale y capitalista de riesgo, quien es uno de los grandes colaboradores de Trump en su recaudación de fondos en Silicon Valley, cercano al multimillonario Elon Musk y muy crítico, como decía, con las grandes tecnológicas, con una crítica muy particular a Google.
“Hace tiempo que debería haberse hecho, pero ya es hora de acabar con Google”, aseguraba Vance en febrero. “Esto importa mucho más que cualquier otra cuestión de integridad electoral. El control monopolístico de la información en nuestra sociedad reside en una empresa tecnológica explícitamente progresista”, advertía.
Musk, que no se ha cortado en las últimas semanas en mostrar su apoyo público a Donald Trump y utilizar X (antes Twitter) para potenciar su campaña a pesar de que había dicho que no intervendría en las elecciones, no es el único magnate tecnológico cercano a Vance. Entre estas personalidades se encuentra Peter Thiel, cofundador de PayPal y de Palantir e inversor de otras grandes firmas como Facebook; así como David Sacks, quien también fue directivo en PayPal y ha liderado otras compañías como Yammer (ahora propiedad de Microsoft); Chamath Palihapitiya, uno de los primeros inversores de Facebook y fundador del fondo Social Capital; entre otros muchos.
A pesar de que precisamente Trump fue el que inició el proceso para vetar a TikTok en Estados Unidos por una supuesta amenaza a la seguridad nacional, ahora el magnate ha defendido la presencia de la app en el país por motivos de competencia.
“Estoy a favor de TikTok porque se necesita competencia. Si no tienes TikTok, tienes Facebook e Instagram”
“Estoy a favor de TikTok porque se necesita competencia. Si no tienes TikTok, tienes Facebook e Instagram”, señalaba hace unos días en una entrevista publicada por Bloomberg.
El futuro de esta aplicación, sin embargo, dependerá de la decisión de la Corte de Apelaciones de Estados Unidos para el Distrito de Columbia, que en septiembre arrancará un juicio con argumentos orales sobre la norma que obliga a ByteDance, matriz de TikTok, a deshacerse de los activos estadounidenses de la app antes del 19 de enero. Recordemos, las elecciones son a principios de noviembre.