Solo el 39% de las empresas, un 45% en el caso de las españolas, tienen la infraestructura (basada en la confianza cero o VPN) para apoyar un entorno de trabajo híbrido seguro y otro 35%, un 34% españolas, o bien no han comenzado a implementar una o no tienen planes de hacerlo. Esta es la conclusión del último estudio de Zscaler, que entrevistó a 1.900 responsables de TI en organizaciones que ya han comenzado a migrar aplicaciones y servicios a la nube.
“Los empleados, sobre todo los jóvenes, tienen una creciente expectativa de que su experiencia digital mientras están en el trabajo debe ser fluida y con un acceso a las aplicaciones sencillo”, dice Ismail Elmas, GVP Internacional de Zscaler.
Un reciente estudio de LinkedIn descubrió que el 93% de las organizaciones de todo el mundo están preocupadas por la retención de sus trabajadores. A medida que las empresas luchan por mantenerse rentables, la estabilidad de la plantilla es fundamental y la retención del talento nunca ha sido tan necesaria.
En efecto, de los responsables de TI encuestados por Zscaler, atraer y retener a los mejores talentos fue considerado uno de los cuatro principales impulsores de la transformación digital (25%, España un 20%) por encima del crecimiento de los ingresos (22%, España un 21%) y el apoyo a nuevas estrategias de negocio (24%, España un 18%).
Aunque las empresas entienden que retener el talento es crucial, muchos directivos de TI reconocen que los empleados están experimentando una mala experiencia digital a causa de que su infraestructura de seguridad legada no es capaz de soportar el trabajo híbrido. Según el estudio, el 52% (España un 45%) señala las experiencias de acceso a aplicaciones y datos como una de las principales razones por las que buscan implantar una infraestructura de trabajo híbrida basada en la confianza cero.
El uso de zero trust permitiría a los empleados un acceso más fluido y directo a las aplicaciones y datos desde sus dispositivos personales.
Otro 39% (España un 35%) considera que el uso de zero trust permitiría a los empleados un acceso más fluido y directo a las aplicaciones y datos desde sus dispositivos personales.
La experiencia de los usuarios no era la única preocupación. Los encuestados también reconocieron que su infraestructura actual puede estar afectando a la productividad de sus empleados. Casi la mitad (46%, España un 48%) de los responsables de la toma de decisiones de TI que están implantando o planean implantar una infraestructura de trabajo híbrida basada en la confianza cero, lo hacían porque sus trabajadores se enfrentaban a problemas de acceso con la actual seguridad, y el 27% (España un 21%) afirmaron querer lograr una conectividad más segura para la plantilla híbrida.
Muchas empresas han recurrido en el pasado a las redes privadas virtuales (VPN) para mantener una red empresarial segura y permitir al mismo tiempo que los dispositivos personales accedan a carpetas seguras.
Aunque en su día pudo parecer una forma rápida y segura de proteger la red de una empresa, el 54% (España un 55%) de los responsables de TI creen ahora que las VPN o los cortafuegos perimetrales son ineficaces para proteger contra los ciberataques y ofrecen poca visibilidad sobre el tráfico de aplicaciones y los ataques.
Desde la perspectiva de la experiencia de los empleados, los datos sugieren que las VPN tampoco son la solución. Dos quintos (39%, España un 29%) de los líderes de TI cuya organización utiliza una VPN dicen que los empleados experimentan un rendimiento lento de las aplicaciones y un tercio (33%, España un 24%) dicen que los empleados experimentan conexiones inestables.