Los envíos de smartphones a nivel global han disminuido un 18,3% año tras año, es decir, durante el cuarto trimestre de 2022, la cifra registrada es de 300,3 millones de unidades. Así lo indican datos de International Data Corporation (IDC) Worldwide Quarterly Mobile Phone Tracker.
Para poner en contexto, este descenso marca el descenso más grande en un solo trimestre, además supone una fuerte caída del 11,3% para el año. Como aspecto interesante, 2022 terminó con envíos de 1210 millones de unidades, es decir el total de envíos anuales más bajo desde 2013 debido a la significativa reducción de la demanda de los consumidores, la inflación y las incertidumbres económicas. Aunque el cierre de año haya sido bastante decepcionante se espera una recuperación del 2,8% para 2023 con un fuerte riesgo a la baja para las previsiones.
Nabila Popal, directora de investigación del equipo Worldwide Tracker de IDC, ha dicho que "nunca hemos visto que los envíos en el trimestre de vacaciones sean más bajos que en el trimestre anterior. Sin embargo, la demanda debilitada y el alto inventario hicieron que los proveedores redujeran drásticamente los envíos. Las fuertes ventas y promociones durante el trimestre ayudaron a agotar el inventario existente en lugar de impulsar el crecimiento de los envíos. Los proveedores son cada vez más cautelosos en sus envíos y la planificación, al mismo tiempo que realinean su enfoque en la rentabilidad. Incluso Apple, que hasta ahora parecía inmune, sufrió un revés en su suministro. cadena con cierres imprevistos en sus fábricas clave en China. Lo que este trimestre de vacaciones nos dice es que el aumento de la inflación y las crecientes preocupaciones macroeconómicas continúan obstaculizando el gasto de los consumidores incluso más de lo esperado y empujando cualquier posible recuperación hasta finales de 2023".