La empresa ha reportado ventas en julio por el valor de 200,8 millones de dólares, un valor llano comparado a junio pero bastante malo respecto al año pasado, ya que ha bajado un 15%. Aunque el segundo trimestre creció un poco con las ventas del HTC 10 y su nueva línea de productos de realidad virtual, HTC Vive,lo cierto es que sus resultados interanuales caen.
“Estamos en una fase de transición, estamos mejorando la organización de arriba a abajo, diseñando nuestro coste de estructura y constituyendo nuestra manera de actuar en el futuro”, comunicaban desde la empresa, haciendo especial hincapié en que le interesan más los resultados trimestre a trimestre que la comparación interanual.
Según Mobile World Live, la compañía ha sido reticente ha entregar datos desglosados de sus divisiones, así que no se puede saber con seguridad si el negocio de Vive VR ha tenido un buen retorno de la inversión. Lo que está claro es que desde dentro están preocupados con la situación como se desprende de las declaraciones de Peter Shen, CFO, que afirma que “obviamente tenemos que volver a traer el equilibrio y reajustar nuestros costes de estructura es vital para ello”.