Para entender lo ocurrido conviene echar una mirada al pasado; ya que, en el año 2013 los únicos que ofrecían conectividad 4G móvil en España eran Vodafone, Orange y Yoigo. Telefónica aún no había ofertado la cuarta generación. Asimismo, Yoigo no tenía servicio convergente con línea fija.
Tras el acuerdo alcanzado entre las dos compañías, Yoigo prestaba a Movistar la red 4G a cambio de poder lanzar ADSL y fibra. Así, en octubre de 2013, nacía la tarifa 'Fusiones a lo Yoigo'. Estas ofertas apenas se diferenciaban de las de Movistar; ya que, al no depender totalmente de ellas, sino de terceros, los precios dependían directamente del proveedor. Por si fuera poco los demás operadores empezaron a ofrecer televisión y contenidos. Debido a estas razones, Yoigo cierra su servicio convergente y apuesta todo al móvil.
Según declaraciones de la portavoz de la compañía: "para Yoigo era un producto residual que no suponía más de un 1%; no aportaba beneficios y sí requería gestión. Era más un servicio postventa que uno de los negocios 'core' de la empresa".
Conviene recordar que las relaciones con Telefónicas quedaron 'tocadas' tras la operación Pepephone y que Yoigo busca actualmente sus beneficios en la guerra de precios de datos móviles, algo en lo plantea batalla y lucha con fuerza y estrategia.
La "Sin fin" de llamadas ilimitadas y 20GB de navegación, muy interesante
Yoigo, que anunció hace poco su objetivo de ofrecer 4G al 80% de los españoles este año, pondrá todo sus esfuerzos en retener esas 14 millones de líneas móviles únicas (sin fusión) que aseguran tienen como clientes.
Además la compañía ha vuelto a sacar su tarifa de 20GB de datos, con llamadas ilimitadas, por unos 24€ al mes. Una oferta muy interesante para aquellos que quieren disfrutar de manera ilimitada de Internet (en Kelisto consideran que los usuarios gastan de media 1,1 GB al mes) y no estén interesados en oferta convergente.